Contaminación; Nen falar ¡¡¡
Verquidos; Está vostede tolo ¡¡¡
Un novo caso do suicidio masivo de peixes que asola Galiza ¡¡¡
Xa están os científicos sobre do tema ...
Creo que coma sighamos así vou pedir o estatudo de apátrida, porque cada vez teño mais verghona de ter o DNI deste país.
Poño a noticia da Voz de Galicia, para que o vexades por vos mesmos, porque é para non dar creto. Morren centos de troitas nun tramo de río, e resulta que foi un SSS (Síndrome de suicidio de salmónidos). Vivir para ver ...
La investigación por la muerte de peces en el Cabe se cierra sin sanciones
Los análisis realizados no detectaron ningún vertido en Ribas Altas
La culpa no tiene dueño, dice un socorrido
refrán. No va desencaminado por lo que respecta al vertido que, a
finales del pasado mes de mayo, provocó la muerte de numerosas truchas
en el coto de Monforte. Lo de vertido es un decir. La conclusión de las
investigaciones realizadas por los servicios de Medio Ambiente de la
Xunta es que no existió. Entonces, ¿de qué murieron los peces? Para esa
pregunta no hay respuesta. El presidente de la sociedad de Pesca Val de
Lemos, que denunció los hechos ante el Servicio de Protección de la
Naturaleza de la Guardia Civil, asiste incrédulo a las explicaciones de
la administración. «Esto es lo más parecido a un cachondeo», se queja
Roberto Martínez.
La sociedad Val de Lemos no recibió todavía, al
menos de forma directa, ninguna información oficial relativa a la
denuncia que dirigió en su día al Seprona. Hay pocas posibilidades, sin
embargo, de que pueda servir de algo. En respuesta a una reciente
iniciativa del grupo parlamentario socialista, la Xunta desveló que las
investigaciones realizadas tras la aparición de peces muertos en Ribas
Altas no arrojaron «resultados concluíntes».
Excesiva tardanza
Las pesquisas corrieron a cargo de los agentes
medioambientales de la Dirección Xeral de Conservación da Natureza, que
recorrieron el tramo de río donde aparecieron los peces muertos «non localizando ningún vertido que puidese ser o causante».
Las piezas que aparecieron flotando en el Cabe, truchas en su inmensa
mayoría, fueron retiradas del río para su posterior análisis.
La mortandad se produjo entre la zona de Freixo,
donde se encuentra la estación potabilizadora de agua, y las
proximidades del puente sobre la antigua carretera de Lugo. Los
pescadores que alertaron sobre la existencia de un vertido aseguran que
de las aguas emanaba un intenso olor a cloro. El primer avisó se dio
alrededor de las ocho y media de la mañana y, según la sociedad de
pesca, los agentes de Medio Ambiente llegaron más de dos horas después.
La inspección del Seprona se habría producido, según las mismas fuentes,
no antes de las cuatro de la tarde.
«La gente está muy cabreada y es normal. No puede
ser que a un pescador lo multen porque lleva una trucha que no da la
medida por unos milímetros y que luego aparezcan un montón de ellas
muertas y no pase nada», dice el presidente de la sociedad Val de Lemos.
Contaminación insuficiente
En una reciente reunión en Lugo, Roberto Martínez
había sido informado por un biólogo del servicio de Medio Ambiente de
la ausencia de pruebas concluyentes sobre el origen del vertido de Ribas
Altas. Según le explicaron, no fueron detectados niveles de
contaminación suficientemente altos como para producir la muerte de los
peces. La repoblación del tramo, una de las contrapartidas que reclama
la sociedad de Val de Lemos, tampoco está nada clara al menos en los
términos en los que la plantean los pescadores.
La entidad que gestiona el coto de pesca Monforte
pretendía que la repoblación del tramo afectado se llevase a cabo
mediante ejemplares adultos. Medio Ambiente, por el contrario, solo
contempla la suelta de alevines de trucha con las mismas características
genéticas del río en el que se va a llevar a cabo. Esta medida,
impulsada a raíz del rotundo fracaso de la política de repoblaciones de
los últimos años, no termina de convencer a los pescadores. «Soltaron en
el Cabe 2.000 o 3.000 alevines de cinco centímetros, pero todos sabemos
que si salen cien adelante será mucho», opina Roberto Martínez.
